Pese a los problemas que se hayan podido crear, la comunidad samanense agradece las inversiones que realiza el gobierno, pidiendo a los mismos mejorías de solución a las mismas.
Samaná.- Las inundaciones y los deslizamientos de tierra se han convertido en el principal problema que enfrenta la provincia Samaná en los últimos años. Durante el fin de semana esta zona costera fue embestida por la inclemencia del tiempo, lo que ha despertado la preocupación de los comunitarios, quienes claman a las autoridades buscar soluciones inmediatas.
Calles, barrios y sectores completos se anegan constantemente, pero lo que más le preocupa a los ciudadanos son las precipitaciones en el área del malecón, las cuales se han intensificado tras la remodelación del mismo, aseguran éstos.
“Vi una entrevista de David Collado diciendo que viene a inaugurar este malecón el fin de mes, y esto no está apto para inaugurar”, precisa el señor Aníbal Encarnacion de los Santos, quien es el presidente de la Asociación de Guías Turísticos de la provincia, solicitando a las autoridades resolver primero las nuevas situaciones que se han creado fruto de las reparaciones.
Asimismo, aseguró que en lugar de fortalecer el turismo, los trabajos que se están realizando y que se pretenden inaugurar con ciertos vicios, van en detrimento de esta actividad económica que sostiene la provincia Samaná.
El talón de Aquiles, que aseguran los lugareños ha intensificado las inundaciones con el remozamiento de la zona malecón, es la clausura de una gran cantidad de registros, los cuales servían de desahogo para que las aguas residuales se encaminan más rápido hacia el mar, función que actualmente cumple la entrada del muelle común de esta ciudad.
Los deslizamientos de tierra en carreteras y zonas habitadas son otro de los grandes problemas que enfrenta esta pujante comunidad, cuyo temor crece cada vez que el tiempo se torna gris.
En la entrada a la ciudad, la cual está siendo intervenida por el gobierno con intención de ampliarla y remozarla, hay una envasadora de gas, cuyo tanque de abastecimiento está quedando en un vacío, ocasionado por los derrumbes. Esta es una situación que ha despertado preocupación en la junta de vecinos, quienes hacen un llamado urgente a las autoridades de actuar al respecto.
«Tenemos miedo de que ese tanque vaya y caiga con esta lluvia», expresó angustiada la señora Fidelina Severino, presidenta de la organización que congrega a los pobladores de Samaná. «A la gobernadora que mire a ver en qué nos puede ayudar», refirió la dama, enfocando su mensaje en el enlace principal del gobierno central, Teodora Mullix Geraldino.
En tanto que, el pastor Pedro Shepard, destacó que la parte baja del terreno que sostiene el tanque de almacenamiento para gas propano, ha colapsado. Por lo que, el mismo se encuentra sobre la base de una superficie débil. «Se va a destronar ese tanque de allá y va ser un peligro para toda esta comunidad que está hacia abajo», expresó preocupado y alertando a las autoridades de actuar inmediatamente.
Reunidos en el área de peligro, manifestaron que en caso del gobierno no responder al llamado, estarían tomando las calles en los próximos días.
Pese a los problemas que se hayan podido crear, la comunidad samanense agradece las inversiones que realiza el gobierno a través del Ministerio de Turismo, pero piden que las cosas se hagan bien, ya que «el cáncer tratado a tiempo, tiene cura».
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